People of San Pedro Creek
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The waters of San Pedro Creek nourished Native Americans for thousands of years before a permanent Spanish settlement was established here in the early 1700s. Canary Islanders who arrived in 1731 and Adaesans who came from East Texas in 1772 lived, grew crops, and grazed their livestock along the creek above and below the town’s plazas. After the city subdivided and sold land west of the creek, beginning in the mid-1800s, the area became a cultural melting pot where Hispanics, African Americans, Asians, and Europeans lived and worked side by side. The thriving neighborhood began to deteriorate in the late 1800s, and by the early 1900s some buildings were used for prostitution and gambling. Finally, in the early 1960s, most of the properties were acquired and demolished for redevelopment by the city’s Urban Renewal Agency.
Source: “Plano de la Villa y Presidio de S. Antonio de Vejar situado en la Provincia de Tejas”; Courtesy: British Library. This map of the presidio and villa of San Antonio de Béxar, drawn by Joseph de Urrutia in 1767, shows a few scattered houses west of San Pedro Creek, which was mislabeled as an acequia.
Courtesy: University of Texas at San Antonio Libraries Special Collections. While most of the early residents near San Pedro Creek were laborers or small shop keepers, José Francisco Ruiz (top) and his nephew, José Antonio Navarro, were among the prominent citizens who lived and worked along and near the creek in the early 1800s.
Courtesy: Casa Navarro State Historic Site. -
Las aguas de San Pedro Creek alimentaron a los nativos americanos durante miles de años antes de que se estableciera un asentamiento español permanente en este lugar a principios del siglo XVIII. Los pobladores de las Islas Canarias, que llegaron en 1731, y los de Adaes, que vinieron del este de Texas en 1772, vivían, cultivaban y pastoreaban su ganado a lo largo del arroyo, por encima y por debajo de las plazas de la ciudad. Cuando la ciudad subdividió y vendió terrenos al oeste del arroyo, a partir de mediados del siglo XIX, el área se convirtió en un crisol cultural en el que convivían y trabajaban hispanos, afroamericanos, asiáticos y europeos. El próspero vecindario comenzó a deteriorarse a finales del siglo XIX, y a principios del siglo XX algunos edificios fueron utilizados para la prostitución y el juego. Finalmente, a principios de la década de 1960, la Agencia de Renovación Urbana de la ciudad adquirió y demolió la mayoría de las propiedades para reurbanizarlas.
Source: “Plano de la Villa y Presidio de S. Antonio de Vejar situado en la Provincia de Tejas”; Courtesy: British Library. Este mapa del presidio y la villa de San Antonio de Béxar, dibujado por Joseph de Urrutia en 1767, muestra algunas casas dispersas al oeste de San Pedro Creek, que fue identificado erróneamente como una acequia.
Courtesy: University of Texas at San Antonio Libraries Special Collections. Aunque la mayoría de los primeros residentes cerca de San Pedro Creek eran obreros o pequeños comerciantes, José Francisco Ruiz (mostrado arriba) y su sobrino, José Antonio Navarro, estaban entre los ciudadanos prominentes que vivían y trabajaban a lo largo y cerca del arroyo a principios del siglo XIX.
Courtesy: Casa Navarro State Historic Site.